Hace un mes decidí que era momento de tomarme un descanso para mí misma. El verano me había dejado más que descansada, exhausta, agotada mentalmente. Y qué mejor sitio para despejarse que Londres (donde la verdad, tengo un hogar fabuloso en el que sé que me van a acoger con los brazos abiertos y voy a poder olvidarme un poco de todo). Como comentaba en el último vídeo, este es mi último año de facultad y sé que más tarde o más temprano mi futuro está en Londres. Me apasionó la ciudad y tengo a mi hermano allí, me siento una privilegiada al tener tantas facilidades para mudarme a esa ciudad el día de mañana. Y me apetecía hacer una primera toma de contacto, sola, en la casa donde seguramente viviré. Las cosas están cambiando y muy rápido. No quiere decir que no sea feliz aquí, al contrario, ahora más que nunca, pero necesito despejar mi mente y pensar solo en mí por unos días para volver con las pilas muy cargadas. El lunes estoy de vuelta, tampoco es que me vaya una eternidad. Pero hasta el martes o miércoles no creo que publique nada. Disfrutad del fin de semana, yo estoy segura de que lo haré. Si queréis seguir mis pasitos londinenses no te olvides de seguirme en Instagram (@miquintaavenida). Gracias por seguir ahí.

love, mel